Alopecia androgénica

La alopecia androgénica (también alopecia androgenética o caída del cabello masculina) es la predisposición genética con carácter hereditario más común; normalmente en la adolescencia, las personas afectadas, producen mucho más enzima del tipo «5-alfa-reductasa», esta enzima convierte a la testosterona en DHT –dihidrotestosterona-, la cual logra disminuir progresivamente el folículo piloso, como consecuencia el cabello se nota mucho más delgado y tiende a desaparecer.

La alopecia androgénica comienza generalmente a los 25 años, aunque también se han observado jóvenes (16 años aprox.); sea cual fuese el caso la alopecia masculina se incrementa.

Tratamientos para la alopecia androgénica

Entre los tratamientos para la calvicie androgénica se tiene en cuenta ciertos medicamentos, los cuales deberán ser recomendados por el médico responsable de su salud capilar:

Finasteride o propecia

En la antigüedad era utilizado para curar enfermedades de la próstata, hoy en día ayuda a solucionar los problemas de calvicie masculina, se trata de un derivado NO hormonal de los corticosteroides, su función es inhibir a la enzima 5-alfa-reductasa. Actúa sólo en la zona específica, no influye sobre el resto del pelo.

El tratamiento debe tener seguimiento según lo especifique el médico, para notar los posibles cambios o efectos secundarios que se presenten en la persona afectada; normalmente es indicado en casos de alopecia leve o en varones que no hayan superado los 40 años.

Ketoconazol en gel

Derivado imidazólico sintético, cuya acción es antifúngica, este producto alivia la descamación o picazón que se pueda producir en el cuero cabelludo. La cantidad de veces que tendrá que echarse será la que indique el médico encargado.

Minoxidil

Se trata de un dilatador que en principio fue utilizado para trata personas con problemas de presión sanguínea, con el tiempo se observo que también tenía efectos beneficiosos para tratar la pérdida del cabello.